Cuento los días… no debería, pero no puedo impedirlo…
Este fin de semana no bajamos al Cusco… y me alegro, aunque esto signifique que no podré darme laS ansiadaS duchaS de agua caliente de todos los fines de semana… ya que esto qupone dos días más par estas hermosas tierras pomacanchinas.
Este fin de semana no bajamos al Cusco… y me alegro, aunque esto signifique que no podré darme laS ansiadaS duchaS de agua caliente de todos los fines de semana… ya que esto qupone dos días más par estas hermosas tierras pomacanchinas.
Pierre se integra bien, esta mañana me he levantado para el mate del desayuno de los niños (era mi turno…) y él también se levantó. Pudo tomar fotos hermosísimas de los niños, para el calendario de este año…
Dios mío !! Qué ambiente tan especial esta mañana… un sol magnífico, los niños lavándose el pelo, los pies, aseándose en esa pila del patio que es casi nuestro único punto de agua, bajo este cielo tan claro, tan lleno de luz, que todo parece más real que en nuestras tierras… al fondo esas montañas que me han acompañado durante estos dos meses… con sus juegos de luz y sombras, con sus juegos con las nubes y el sol…
Grabo todas estas sensaciones en mi mente y en mi cuerpo, activo al máximo mis cinco sentidos para no perderme ni un ápice de este momento,... para más tarde, lejos de aquí, en mi tierra de adopción, poder cerrar los ojos … y revivirlo…
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